sábado, 2 de noviembre de 2013

Es hoy…


Por José Luís Nunes Martins
publicado em 2 Nov 2013 - 05:00






Un día entero, por más corto que parezca, es enorme… por lo que sabremos descubrir todo cuanto en él es posible. Nada en este mundo está decidido, ni nadie está acabado. Nos construimos, de la manera como nos criamos, de acuerdo a las respuestas al mundo y a los otros. Siempre somos más de lo que esperan de nosotros. Siempre.

La más perfecta de la criaturas divinas es el hombre… su perfección está en ser incompleto. Sublime criatura creadora.

La verdad de nuestra esencia será aquella que, con nuestro tiempo, conseguimos construir. Sólo al fin seremos completos. Hasta ese momento, hay que vivir las horas y los minutos que nos restan del día de hoy, sin perdernos en la contemplación de los frutos. De poco nos sirve preocuparnos con lo que no está en nuestras manos. Pude llegar después, sí, por más que me empeñe, será una preocupación del día por llegar, no de hoy.

El futuro que importa es el tiempo que tenemos en la punta de los dedos…el hoy. Todo lo demás es parte de una eternidad a la que no nos referimos.

Nunca somos el fin de nosotros mismos, pero conseguimos serlo del otro…una vía para la finalidad de alguien, un fin de su ser… un por qué y un para qué de su vida… un siempre.

El premio por abandonar lo que fuimos es ser un ser nuevo, y mejor, cada día. Sacrifiquemos el ser finito y completo de ayer, por la eternidad, abierto al instante que  nos toca vivir en este preciso, y precioso, momento. Nada somos sino lo que seamos capaces de construir con el amor de nuestras manos, ahora.


Finalmente, todo cuanto no aconteció en un año, puede suceder en un solo día

3 comentarios:

  1. Hoy me gusta esta crónica por la brevedad, la concisión y la exactitud, me quedo con esta frase: “…hay que vivir las horas y los minutos que nos restan del día de hoy, sin perdernos en la contemplación de los frutos. De poco nos sirve preocuparnos con lo que no está en nuestras manos. Pude llegar después, sí, por más que me empeñe, será una preocupación del día por llegar, no de hoy.”
    ¡Qué a tiempo me llega esta crónica! Y sobre todo porque debieran ser más preocupaciones ajenas, y no propias. Pero, de todos modos, con lo fácilmente que nos lo explicas, José Luis, lo sencillo sería ponerlo en práctica y, sin embargo, cuánto cuesta soltar ese lastre inútil y además precipitado. Cuántas veces el temor a lo por llegar es infundado o cuando menos exagerado, pero coarta y paraliza, impide realizar otras cosas provechosas. Yo reconozco que tropiezo muchas veces en esta piedra, por eso viene muy bien un recordatorio como el de hoy. Muito obrigado.

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  2. Muy acertada publicación, gracias ¡¡

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  3. Las gracias s las damos al autor de ls crónicas filosóficas Jose luis Nunes

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