Hoy repasaba algunos textos bíblicos que voy
seleccionando para tener una referencia a la hora de analizar y juzgar la
sociedad en que vivimos, y ver cómo se puede humanizar la sociedad y las leyes.
Me llama la atención la sencillez y claridad de estas leyes, pero sobre todo la
apelación directa a cada persona, de manera que juzgan sin necesidad de juicio
la conducta de cada uno, son una invitación a la piedad y a la búsqueda del bien del prójimo
necesitado como la mejor garantía del bienestar propio y el de todos.
Son estos:
“Cuando
le reclames a tu prójimo algo que te debe, no entrarás en su casa para reclamar la
prenda, sino que permanecerás a la puerta y él te sacará lo
que tuviere. Ahora bien: si es pobre, la prenda no pasará la noche en tu casa, sino que se la
devolverás inmediatamente antes de la puesta del sol para que duerma sobre su
ropa y te bendiga y así halles justicia ante el Señor tu Dios.
No
negarás su paga al indigente y al pobre ya se trate de tu hermano, ya sea un extranjero que mora contigo en tu tierra y en tu ciudad;
antes bien, le pagarás cada día su
salario antes de la puesta del sol, porque es pobre" y así es como
sustenta a su vida, no
vaya a ser que clame contra ti ante el Señor y se te impute como pecado. Que los padres no sufran la pena capital en
lugar de los hijos, ni los hijos en lugar de sus padres, sino que cada
uno muera por su propio delito". Dt 24,
10-16.
"Cuando
siegues la mies en tu campo y te dejes olvidada alguna gavilla, no retornes a
recogerla, sino deja que se la
lleve algún extranjero, algún huérfano o alguna viuda, para que el Señor, tu Dios, te
bendiga en todas las empresas que pongas en práctica.
Cuando
recolectes el fruto de tus olivos y se quede algo en las ramas, no retornes a
recogerlo, sino déjalo para el extranjero, el huérfano y la viuda.
Cuando vendimies tu viña, no
rebusques los racimos olvidados, sino que queden para el extranjero,
para el huérfano y la viuda.
Acuérdate
de que también tú fuiste esclavo en Egipto.
Por eso te mando que obres así". Dt 24, 19-22.
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