José Luís Nunes Martins
jornal i, 18 janeiro 2014
http://www.ionline.pt/iopiniao/proxima-estacao
Ilustração de Carlos Ribeiro
Querida amiga,
Ya
estarás lejos cuando te dispongas a leer estas líneas… permíteme que comparta contigo lo que siento respecto de esta
tu gran mudanza…
Nunca es bueno anclarnos
en la “saudade” ni en los sueños. Nuestra casa, nuestro país, es el lugar donde
nosotros estamos. Es ahí donde tenemos que ser quienes somos. Es ahí donde
tenemos que descubrir la felicidad de cada día. Todo el resto es extranjero.
Cada hombre pertenece
tanto al sitio de donde viene como aquel para donde va. La idea de que nuestras
raíces nos sujetan y condenan sigue en la línea equivocada de la otra, también
común, de que los sueños nos hacen perder… no, la vida es esta forma de ir
siendo siempre más, lo que se fue, tanto cuanto lo que aún no se es… un viaje, ni
una estación.
Sé que partes con dolor
porque temes perder a quien se queda aquí y no tiene a nadie con ella, donde
llegarás… sabes, en poco tiempo, tendrás que aceptar que muchos de los que
ahora lamentan mucho tu partida, se preocuparán poco de saber cómo estás…
Ya hiciste a mucha
gente feliz aquí… Pero, estoy convencido que el cambio va a ser algo magnífico
para mucha gente: en el sitio para donde vas hay mucha gente que te necesita
para ser feliz, aunque por ahora, ni siquiera sabían que es a ti a quien
esperaban… eres una sembradora de alegría, lo eres por don quiera que
anduvieres… por más largo y extraño que sea el lugar y el pueblo donde
estuvieres.
Comenzar de nuevo es
difícil, pero permite que comencemos siempre más fuertes, en la medida en que
partimos con más errores acumulados y más voluntad de aprovechar bien la vida,
en un tiempo que se acorta a cada hora…
En la alegría y en la tristeza, oblígate a no dudar nunca que el amor existe. Puede no estar donde tú crees, ni con quien te gustaría… pero existe. Dentro de ti, nunca se agotará, porque siempre que lo entregamos, vuelve a nacer más grande y más bello… lo que nos hace, tal vez más frágiles en este mundo, pero mucho más fuertes… en el que interesa.
No te enredes en grandes debates sobre la justicia en el mundo… El mundo es injusto. Nos cumple a cada uno procurar, a través de nuestras acciones, dejarlo menos injusto.
En la alegría y en la tristeza, oblígate a no dudar nunca que el amor existe. Puede no estar donde tú crees, ni con quien te gustaría… pero existe. Dentro de ti, nunca se agotará, porque siempre que lo entregamos, vuelve a nacer más grande y más bello… lo que nos hace, tal vez más frágiles en este mundo, pero mucho más fuertes… en el que interesa.
No te enredes en grandes debates sobre la justicia en el mundo… El mundo es injusto. Nos cumple a cada uno procurar, a través de nuestras acciones, dejarlo menos injusto.
Procura ser una gran
mujer, pero no en lo que se ve. La sonrisa de aquella persona sencilla que
nunca más se cruzará contigo en la vida, tal vez sea más importante que una
salva de aplausos de gente conocida.
Sueña, mucho, pero levántate
pronto para luchar por lo que sueñas. La
diferencia en el mundo no es entre los que son capaces de soñar y los que no lo
hacen… es entre los que abren los ojos y luchan y aquellos que, con los ojos
bien cerrados, esperan que todo les llegue sin esfuerzo.
Según pienso, llegarás
lejos, muy, muy alto… donde pocos llegan, por eso prepárate y no te extrañes
cuando te enfrentares a desafíos y sufrimientos a los que nunca viste a nadie
estar expuesto… tu camino es tu camino. No te compares con nadie. Eres única.
Cuando flaquees y caigas…
¡Levántate! Igual cuando no sepas para qué o cómo. Levántate… ya que la mayor
fortaleza que tienes deberá ser usada para vencer sobre los egoísmos y los
miedos… Quien no perdona los pequeños defectos, nunca llega a disfrutar de las
grandes virtudes…
No busques quien te
ame. Busca a quien amar.
Pienso, en lo más
profundo de mí, que eres un pedazo de Dios en el mundo.
No te entretengas más
conmigo, ¡ve, que hay por ahí personas que te necesitan para ser más felices…
ve!
Me agradas mucho.
Rezo por ti.
ResponderEliminar“No te enredes en grandes debates sobre la justicia en el mundo… El mundo es injusto. Nos cumple a cada uno procurar, a través de nuestras acciones, dejarlo menos injusto.
Comenzar de nuevo es difícil, pero permite que comencemos siempre más fuertes, en la medida en que partimos con más errores acumulados y más voluntad de aprovechar bien la vida, en un tiempo que se acorta a cada hora…”
Me quedo con estas dos ideas para mí. La crónica de hoy es fantástica, una sorpresa, y una prueba de que lo que nos dice lo practica: hay que esforzarse, sin esfuerzo no hay recompensa ni felicidad. Pues esta nueva forma o estilo epistolar se te da muy bien, estoy seguro de que muchas personas están deseando leer una preciosa carta, cuidada, echándolas de menos y dándole los mejores consejos, desde la amistad verdadera. Muito obrigado